¿Tengo Derecho A Conocer Los Límites De La Póliza De Seguro Del Otro Conductor?
Legalmente las compañías de seguros deben proporcionarle esta información si sus facturas médicas superan los $12,500. Esa cifra es la mitad de los $25,000 que exige el seguro mínimo de Virginia. Por lo que en 2008, los legisladores razonaron que si las facturas médicas de la víctima son inferiores a los $12,500, no hay ninguna razón por la que la compañía de seguros deba revelar esta información.
¿Por qué es importante esta información? Porque, como se menciona a continuación, las facturas médicas de la víctima por una colisión automovilística grave a menudo superan los $25,000. Por lo tanto, para planificar adecuadamente el reclamo de compensación, un abogado de lesiones personales de Richmond necesita saber qué porcentaje de los daños de la víctima cubrirá la compañía de seguros del infractor (conductor negligente) ya que esa cantidad tiene una influencia significativa en el caso.
Lesiones en un Reclamo por Colisión de Vehículos
La hospitalización en el área de Richmond cuesta un promedio de más de $3,000 por día. Otros costos médicos, como fisioterapia, medicamentos recetados y dispositivos médicos, podrían agregar miles de dólares a este total. Eso es especialmente cierto ya que, en la mayoría de los casos, los planes de seguro médico grupal se niegan a pagar los costos relacionados con las lesiones, citando preocupaciones de responsabilidad legal.
Aún no hemos abordado otras pérdidas económicas como daños a la propiedad y perdidas salarios. Además en un caso de lesiones graves, los daños no económicos como el dolor y el sufrimiento pueden aumentar significativamente la cantidad de daños.
El cuidado de las lesiones por accidente de tráfico no solo son costosas, sino que también requiere de atención médica especializada. Por ejemplo las lesiones en la cabeza, las cuales son muy frecuentes en los accidentes de tráfico. Tanto un impacto traumático como el movimiento repentino y violento de una colisión podrían causar una lesión en la cabeza. Cuando esto sucede el cerebro golpea repetidamente contra el interior del cráneo de la víctima.
Aunque estas lesiones son constantes, los médicos con frecuencia las diagnostican erróneamente, ya que muchos asumen que el impacto del accidente causa síntomas iniciales de lesión en la cabeza, tales como dolores y desorientación. Asimismo, muchas de estas víctimas mencionan a sus médicos que «se sienten bien.” Sin embargo, el cerebro oculta sus propias heridas y esa es la razón principal por la que los atletas con conmoción cerebral piden a sus entrenadores que los vuelvan a poner en el juego.
Debido a estos problemas, conectamos inmediatamente a las víctimas de accidentes automovilísticos con médicos experimentados. De esa forma, las víctimas reciben el tratamiento que necesitan.
Evidencia en Reclamos por Negligencia
Para obtener una compensación por estas costosas lesiones las víctimas/demandantes deben demostrar la negligencia, o la falta de cuidado. Mediante una preponderancia de las pruebas, lo que significa que la probabilidad está a su favor.
Por lo general una combinación de facturas médicas, el informe policial del accidente y el propio testimonio de la víctima proporcionan las pruebas necesarias. Pero ese no es siempre el caso. Si la víctima murió en el accidente su testimonio obviamente no se encuentra disponible. Esa pérdida también afecta el informe policial del accidente, y en estos casos, la parte narrativa más importante solo refleja un lado de la historia, por lo que el informe es impreciso.
La evidencia electrónica, como un Registrador de Datos de Eventos (RDE) del vehículo, a menudo corrige la falta de información. La mayoría de los RDE miden y registran información como:
- Aplicación de freno.
- Ángulo de dirección.
- RPM del motor.
- Velocidad del vehículo.
Dicha evidencia electrónica a menudo le interesa a los jurados expertos en tecnología. Sin embargo, esta prueba vital no siempre está disponible, ya que muchas compañías de seguros destruyen vehículos chocados a los pocos días del accidente. Si eso sucede, cualquier evidencia física que contenía el vehículo, como el RDE, se pierde.
Por ello, los abogados suelen enviar cartas de expoliación a las compañías de seguros. Estas cartas crean el deber legal de preservar todas las posibles pruebas, incluyendo el RDE para el juicio.
Responsabilidad de terceros
En un reclamo por lesiones graves, las pérdidas económicas por sí solas podrían exceder los $4 millones. La mayoría de los infractores no tienen suficiente seguro para cubrir costos tan grandes, incluso aunque el infractor tuviera una gran póliza.
La responsabilidad indirecta es muy importante en estas situaciones. Por ejemplo, si la víctima resultó herida en un accidente con un conductor de camión, Uber u otro operador comercial, se podría aplicar la regla de corresponder al superior. Esta doctrina legal responsabiliza financieramente a los empleadores por la negligencia de sus empleados.
Aquí es cuando la discusión vuelve a la cobertura del seguro. Las reclamaciones de responsabilidad indirecta son bastante complejas. Es decir, si el autor del daño tiene suficiente cobertura de seguro para proporcionar una compensación justa, a menudo no hay razón para explorar las posibilidades de responsabilidad de terceros y retrasar el acuerdo de la víctima/demandante.
Generalmente, si desea conocer los límites de cobertura del seguro del otro conductor, la empresa debe proporcionar esa información si sus facturas médicas superan los $12,500. Para una consulta gratuita con un abogado experto en accidentes automovilísticos de Richmond, comuníquese con Geoff McDonald & Associates, P.C. Se encuentran disponibles visitas virtuales, domiciliarias y hospitalarias.